Motos de tres ruedas, opción de transporte urbano

Cuando hablamos de motos de tres ruedas, de inmediato se nos viene a la mente algo parecido a los viejos triciclos en los que las llantas traseras impedían que el conductor cayera y que poco a poco se transformaron en vehículos de carga.

No, en este artículo hablamos de esas motos o scooters con dos llantas delanteras, mismas que aunque tienen más de una década en el mercado, en realidad son poco comunes en las calles, de hecho cuando llegaron fueron vistas más como juguetes que como un transporte serio.

Hace poco más de una década varias marcas, sobre todo europeas, buscaban medios eficientes para combatir el tránsito urbano y así surgen estas motos de tres ruedas, que más bien tienen un concepto muy similar al de las scooters, con quienes comparten peso y hasta ciertas dimensiones y características.

La ventaja de este tipo de motos de tres ruedas es que el eje delantero se mantiene en control y evita resbalones o falta de apoyo en las curvas e incluso nos ayuda en la pérdida de tracción que normalmente se puede corregir con pericia si ocurre en el eje trasero, pero en el delantero no pasa de la misma manera.

La tercera rueda, segunda delantera, ayuda para evitar derrapes

Ese segundo punto de apoyo evita los derrapes e incluso que la dirección se mueva de manera descontrolada en zonas bacheadas ya que una rueda amortigua y la otra conduce, algo que ha hecho pensar a muchos que son vehículos pensados en conductores novatos, algo que es totalmente falso, pues alguien que aprende en una moto de tres ruedas tendrá serios problemas para saltar a una moto común, algo incluso peor que aprender a manejar en un automático con todas las ayudas encendidas. 

De hecho, un motociclista medianamente experto o incluso experto, sería el conductor ideal para una de estas scooters, pues así sabría aprovechar sus ventajas, tales como tener dos puntos de apoyo en frenada y muchas ventajas de conducción en suelo resbaloso, mojado o con baldosas.

Ojo, si eres un mal conductor, por más motos de tres ruedas que uses, nada te salvará de una caída o de un mal momento, de hecho, esa tuerces rueda no sostiene a la moto, por lo que cuando bajes tienes que acomodarla como una moto cualquiera.

Es un buen vehículo urbano, aunque debes ser más prudente sobre él, pues su radio de giro es más corto, y su maniobrabilidad un poco menor, es decir, si eres de esos motociclistas acostumbrados a balancearse entre carriles, olvídalo pues su maniobrabilidad es un poco más pesada, por lo que hay que conducir con más calma y de manera conservadora.

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